miércoles, 13 de mayo de 2015

CRONICA 101 KMS. DE RONDA por Frank Aran

CRONICA 101 KMS. DE RONDA por Frank Aran



El sábado día de la prueba había quedado con el compañero de club José Luis Pedraza a las 6,30, y salimos dirección Ronda. A mitad de camino nos paramos a desayunar y sobre las 9 llegamos a destino. Tras ardua búsqueda de aparcamiento cerca de la llegada, lo encontramos en la calle Divino Pastor, nombre que durante muchos instantes nos repetíamos los dos para saber donde habíamos dejado el coche. Con buen criterio JL me dio copia de las llaves del coche para tener una cada uno , por si alguno de los dos se retiraba pudiera ir al coche a descansar y esperar al compañero. Y sobre las 9,30 nos dirigimos al punto de salida, al polideportivo, mucha gente que se dirigía al lugar, mucho ambiente. Cuando estuvimos cerca ya había colas para entrar al campo de fútbol, pero vino bien, porque así pudimos ver la salida de los MTB que lo hacían una hora antes.
Comunicamos con Mauri y Juanlu que ya estaban dentro del campo de fútbol Tras el sellado del pasaporte legionario, dejamos la bolsa de ropa de recambio para Setenil. Nos adentramos al campo de fútbol pero no dimos con Mauri y Juanlu. Fotos de rigor y tras los Vivas a España, Viva al Rey y Viva La Legión, dieron la salida. Me izo gracia que nada mas salir del polideportivo, nos decían “animo, que ya os queda menos” frase esta que no pararíamos de escuchar en todo el recorrido, esta junto “venga que ya lo tenéis”, “que ya os queda poco”, “que ya no queda na” “esto ya esta terminao”fueron palabras que escuchamos fuésemos por el km que fuésemos
Caminamos durante un buen rato por Ronda por los numerosos participantes y cuando llegamos al centro empezamos a correr, pasamos incluso por dentro de la plaza de toros, parada para fotos y a seguir. Salimos de Ronda y nos encontramos el primer avituallamiento, km 5. seguimos sin repostar y continuamos, nos teníamos que parar constantemente ya seguíamos por un sendero estrecho, y antes de llegar al km 10 vimos a Super Paco, impresionante lo de este hombre, no solo ya por su edad, 76 creo que me dijeron, sino porque hace casi todo el recorrido corriendo, y no utiliza ni zapatillas ultratral ni medias ni mallas compresiva, ni camiseta técnica ni una camelback de Salomon de140 pavos. Iba equipado con una pantalón y camisa que utiliza para el campo, botas, sobrero de paja y una vara,
con una pequeña mochila, no vi ni que llevara botella de agua. Pronto llegamos al avituallamiento km 10 y tras una larga cola (solo dos grifos) para reponer agua en los bidones reanudamos la marcha. Seguía las indicaciones de JL al dedillo, ahora trotamos, ahora cortamos, coincidiendo con las bajadas, llanos o si eran cuestas. Nos unimos durante un tramo con un grupo de chicas de la caballería del ejercito, vi que JL hablaba con ellas y estas les respondieron que corrieran junto a ellas. Justamente con ellas pasamos por debajo de un puente, donde se congregaba numeroso publico para resguardarse del sol y de la calor y que fueron muy aplaudidas y que resonaron muy fuerte dentro del puente. En ese punto nos cruzamos con los primeros clasificados de la prueba, llevaban un buen ritmo pese al inicio prácticamente de la prueba y del calor reinante. En el km 20 tuvimos el primer avituallamiento con comida, comí un sándwich y un trozo de plátano, bebida isotónica JL se dio cuenta que solo tenia una botella, le dije que las dos corría fatal, me procuro no se como otro bidón para mi, “hace mucha calor y necesitaras hidrata rte bien” me comento. En km 25 note que los gemelos empezaban a darme pinchazos, empezamos pronto pensé. Me hize un auto masaje y continuamos, parándonos a caminar cuando volvía a sentir los pinchazos. En el km 30 me empezó a doler la espalda y en el 35, coincidiendo con una cuesta, el hachazo, empece a marearme y le dije a JL que me pararía un rato, no se si no me oyó, o es que no salían las palabras de mi boca, que no me vio como me paraba en una sombra, en esos momentos estaba KO (quien me manda a mi hacer esta prueba, vaya mierda de 101, ya no participo en ninguna carrera mas, ya no corro siquiera en mi vida) eran mis pensamientos en esos momentos. No se que cara tendría, pero la gente que pasaba no paraba de preguntarme si necesitaba algo, me ofrecieron, sales, glucosa, agua, isotónico, iboprofenos, ya tenia de todo eso, hasta que alguien me dijo que si quería galletas de avena, recordé que en el avituallamiento anterior cogí un donut y lo guarde en la mochila, no se si seria eso o el remojon que me di en una acequia que había, que me espabile y seguí con la cuesta, en esos momentos me llamo JL preocupado porque no me veía, le dije lo que me había pasado pero que estaba mejor. Me espero en lo alto de la cuesta a que llegara, y le dije que continuara el solo, que yo estaba con problemas, declino la oferta y siguió junto a mi dándome conversación y ánimos. Nunca se lo agradeceré bastante, ya que fueron los momentos mas duros de la prueba. Cada vez me sentía mejor y volvimos a la estrategia del trotar, cortar, trotar, cortar, hasta que oímos que alguien nos llamaba, era Juanlu, que lo habíamos adelantado sin darnos cuenta. También el había tenido un pajaron y su cara blanca como el papel reflejaba sufrimiento. Nos dijo que Mauri había salido unos 10 minutos antes ya que el estaba decidido a retirarse. Tanto JL como yo nos quedamos junto el para animarle y darle conversación, aunque tardo un poco mas que yo, poco a poco fue recuperándose, llegando a trotar hasta llegar a Alcala, allí nos tomamos una cerveza sin alcohol, mientras el se tomaba medio bocata y un refresco. Parece que le sentó de maravilla, y seguimos los tres con la estrategia de trotar, cortar, trotar, cortar. Hasta llegar a Seteni, km 54, impresionante recibimiento el de ese pueblo, solo con vivir esa experiencia vale la pena realizar esta prueba, fue emocionante. Recuerdo que unos chicos me invitaron a tomar cerveza
, les dije que vale, y me querían dar una litrona, me conforme con una caña jeje. Cruzamos Setenil entre numeroso publico hasta enconrar un bar que JL decía que en ediciones pasada se paraba a tomar 2 cervezas sin alcohol y un pin-chito de pollo. Mientras esperábamos el pin chito en el bar, vimos con sorpresa al compañero de club J:M. Hurtado y su mujer Olga, fabuloso, que nos viniera a recibir. Juanlu estaba nervioso por la tardanza de los pinchitos y opto por ir al avituallamientos cercano a esperarnos ahi, ya no lo vimos mas, mas tarde se disculpo que tras ver que no nos veía opto por seguir adelante ya que para el era malo estar parado” lo comprendimos y seguramente en su circunstancia haríamos lo mismo. Mientras comíamos el pin chito oímos una ovación, que pasa nos preguntamos, era SuperPaco que llegaba a Setenil,
corriendo como si nada a sus 76 años. Ya salimos acompañados durante unos metros con Xema y Olga y nos despedimos de ellos antes de entrar el el polideportivo de Setenil. Allí recogimos las bolsas para cambiarnos de ropa, y poner en la mochila ropa para pasar la noche que prometía fría. Hicimos una visita al departamento de fisio, donde tanto a JL como a mi nos dieron masajes, a mi sobretodo en los gemelos que seguían doloridos. Observe que estaban mucho rato conmigo, y una chica que parecía la jefa que dijo que debía hacer unas pruebas a enfermería, ya que mis gemelos estaban teniendo espasmos y no aflojaban pese al hielo y al tratamiento de masaje. Le dije que iría, y ante el temor que me retiraran de la prueba no hice caso. Entre unas cosas y otras estuvimos casi dos horas parados en Setenil. Antes de salir nos dieron una luz para ponerla en la mochila en su parte posterior y proseguimos, próxima parada Cuartel del Tercio, a 20 km.. Camino al Cuartel empezó a anochecer, creo que fue por entonce cuando JL me comento que tenia molestias en un tobillo y junto con una ampolla le estaba fastidiando bastante. Pronto empece a ponerme la camiseta de manga larga porque empezaba a refrescar y seguimos hasta el Cuartel. Allí nos esperaba un rancho legionario compuesto por arroz, caldo 2 salchichas frías de frankfurt y un yogurt. Y aunque estaba bastante malo todo salvo el caldo, me lo comí todo. Un legionario me comento que este año habían contratado un catering y que no lo habian echo ellos la comida. Fuimos al departamento de chapa y pintura como decía JL a cuidarnos de nuestras dolencias
y partimos del Cuartel una hora y media después de haber entrado. Ahora empieza lo duro , ahora empieza la carrera de verdad. Decia JL Pero que dice pensé, y hasta ahora que era un camino de rosas?. Pero efectivamente quedaba lo mas duro. Sus dolencias en el tobillo iba aumentando sobre todo cuando iniciábamos una pronunciada bajada, a partir de ahora todo era subir una burrada y bajar una bestialidad y todo eso acompañado por un terreno peligroso lleno de piedras sueltas. Sin embargo cuando estábamos en la cuesta que ascendía a la ermita, JL empezó a correr, pues yo que le seguí,. Coronamos la ermita y allí nos enteramos que Mauri ya había llegado, 16 horas y pico, genial. Bajamos la cuesta, muy empinada hasta el avituallamiento del km 82. Desde abajo se veía las luces de los frontales de los marchadores en un zig zar, bonito espectáculo que me quede unos minutos mirando. Aprovechando el piso que era de asfalto y bajada hasta Benaojan decidimos correr hasta el próximo puesto . La gente nos miraba alucinada, “que envidia me dais poder correr a esas alturas” decían algunos, lo que no sabían el sufrimiento que llevábamos por dentro.. Tras repostar en el km 87 empezó el calvario para Jl sus dolencias del tobillo fueron constantes aumentándose en una prolongada y peligrosa bajada. Por muy despacio que yo fuera, el iba mucho mas lento aun , me adelantaba sin querer y me paraba constantemente a esperarlo. Llegar hasta el puesto del km 92 fue un suplicio para el. Allí le conseguí hielo, y junto con una barrita energética parecía que se recuperaba. Vete tu que yo estoy fatal, comentaba JL, pero estaba claro que no le iba a hacer caso por mas que me lo dijera.

Poco a poco nos acercamos al ultimo avituallamiento, km 97 donde empezo hacerse de día. Las vistas de Ronda nos animaron mucho, y subimos la cuesta del cachondeo donde un legionario de color no paraba de repetir , Arriba, Arriba Arriba, con un vozarrón que se oía desde muy lejos, luego me entere que estuvo así horas. Subida la cuesta del cachondeo entrada en Ronda. Es curioso pero en esos momentos no me dolía nada, simplemente estaba alucinado y emocionado, tras mas de 21 horas llegamos por fin en la meta, quise hacer un vídeo de la llegada , pero simplemente no podía, estaba llorando de emoción. Me repuse como pude y cruzamos la meta tras 21 horas y 40 minutos. Saludo y medalla por parte del legionario y abrazo con mi compi del alma.

Agradecer a los miembros del club Nuevas Promesas de Gines por las muestras de animo y felicitaciones posteriores, sobretodo a Xema por habernos ir a vernos por nuestro paso por Setenil
También a mis amigos del gimnasio por sus ánimos mediante wasaps
A mi pareja, por sus constantes ánimos mediante llamadas al móvil
Al cuerpo de legionarios por su organización y predisposición
Y al publico en general por sus muestras de animo, sobre todo en Setenil

Tras la prueba la termine odiando y que no volvería a repetir. 48 horas después la odio un poco menos. Y como dice Mauri, dentro de 3 o 4 años querrás volver hacerla.
Pero simplemente decir, que ha sido una experiencia maravillosa y que invito a todo el mundo que lo haga al menos una vez en la vida.

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